Foco Ecuménico: ocho claves para ser felices

Dadas las tablas actuariales condicionales, he vivido ya más de la mitad de mi vida. Creo que finalmente logré entender algunas claves para vivir una vida más feliz. Quiero compartirlas con ustedes estimados lectores (si no lo hiciese, de hecho, faltaría a una de ellas). Después de muchas lecturas sobre filosofía, psicología, sociobiología, literatura, ensayos (ese género genial creado por Montaigne y tan poco usado en este foro) y economía (esta última disciplina poco aporta a esta entrada lamentablemente), y del aprendizaje obtenido al recorrer mi “media vida”, me animo a decir que llegué a la conclusión que las personas estructuralmente felices:

Saben qué quieren y tienen un objetivo de vida bien definido.

Viven anclados en el presente, sin darle vueltas al pasado y sin angustiarse ni fantasear respecto del futuro.

Las circunstancias externas, y entre ellas el éxito material, les afectan poco. Son conscientes de que la vida está sembrada de dificultades y las integran en el ciclo de su existencia.

Cuidan su cuerpo y su mente como bienes muy preciados.

Tienen una vida interior muy rica.

Están en contacto con sus seres queridos.

Practican la benevolencia, la gratitud y se abstienen de juzgar.

No buscan la aprobación en la mirada de los demás.